En cualquier etapa de la vida, realizar actividad física es clave para obtener bienestar y salud. Para activarse, los adultos mayores no requieren necesariamente practicar un deporte, basta con que se muevan al caminar o al bailar y con realizar ejercicios de estiramiento.
En la vejez es importante que las personas continúen ejercitándose, pues esto aporta beneficios a la salud física, mental y nutricional. Si un adulto lleva una buena alimentación y se mantiene activo, su calidad de vida mejora y puede vivir más que la esperanza de vida actual, que es de entre 76 y 78 años. Sin embargo, a más edad, menos actividad física realizan las personas.
Moverse todos los días y evitar el sedentarismo ayuda a favorecer la óptima absorción de la glucosa, lo que mantiene los niveles de azúcar más estables, además de ayudar a tener menor presión arterial, y aumentar la densidad de los huesos que evita, a la larga, la osteoporosis.
Para que los adultos mayores no dejen de ejercitarse, incluso si ya presentan algunas complicaciones de movilidad, los expertos recomiendan algunos ejercicios idóneos para la tercera edad:
Activación física
Abarca desde caminatas diarias de 10 minutos, baile de salón y ejercicios aeróbicos básicos.
Estas actividades son ideales para prevenir problemas de contractura muscular, además, estimulan el equilibrio anatómico.
Al tomar clases grupales, también se impulsa la convivencia social, un aspecto importante para la salud mental.
Estiramiento
Los ejercicios de estiramiento ayudan con los problemas reumáticos, ya que mejoran la circulación y la funcionalidad de las articulaciones.
Se pueden realizar sentados en una silla, pues consistente en elevar y flexionar brazos y piernas de manera sencilla. También los pueden llevar a cabo adultos mayores que ya usan alguna herramienta de apoyo para moverse, como bastones o andaderas.
Tai Chi
Se trata de un arte marcial que a través de movimientos suaves mejora la salud física, pues trabaja con el equilibrio y con ejercicios rehabilitadores.
Este ejercicio de bajo impacto aporta también habilidades de concentración y promueve la meditación, por lo que favorece la salud mental.
En cualquier etapa de la vida, realizar actividad física es clave para obtener bienestar y salud. Para activarse, los adultos mayores no requieren necesariamente practicar un deporte, basta con que se muevan al caminar o al bailar y con realizar ejercicios de estiramiento.
En la vejez es importante que las personas continúen ejercitándose, pues esto aporta beneficios a la salud física, mental y nutricional. Si un adulto lleva una buena alimentación y se mantiene activo, su calidad de vida mejora y puede vivir más que la esperanza de vida actual, que es de entre 76 y 78 años. Sin embargo, a más edad, menos actividad física realizan las personas.
Moverse todos los días y evitar el sedentarismo ayuda a favorecer la óptima absorción de la glucosa, lo que mantiene los niveles de azúcar más estables, además de ayudar a tener menor presión arterial, y aumentar la densidad de los huesos que evita, a la larga, la osteoporosis.
Para que los adultos mayores no dejen de ejercitarse, incluso si ya presentan algunas complicaciones de movilidad, los expertos recomiendan algunos ejercicios idóneos para la tercera edad:
Activación física
Abarca desde caminatas diarias de 10 minutos, baile de salón y ejercicios aeróbicos básicos.
Estas actividades son ideales para prevenir problemas de contractura muscular, además, estimulan el equilibrio anatómico.
Al tomar clases grupales, también se impulsa la convivencia social, un aspecto importante para la salud mental.
Estiramiento
Los ejercicios de estiramiento ayudan con los problemas reumáticos, ya que mejoran la circulación y la funcionalidad de las articulaciones.
Se pueden realizar sentados en una silla, pues consistente en elevar y flexionar brazos y piernas de manera sencilla. También los pueden llevar a cabo adultos mayores que ya usan alguna herramienta de apoyo para moverse, como bastones o andaderas.
Tai Chi
Se trata de un arte marcial que a través de movimientos suaves mejora la salud física, pues trabaja con el equilibrio y con ejercicios rehabilitadores.
Este ejercicio de bajo impacto aporta también habilidades de concentración y promueve la meditación, por lo que favorece la salud mental.