La sal realza los sabores de los alimentos y puede utilizarse en la gran mayoría de los platillos. Es un producto básico en la alimentación actual, sin embargo, cuando te excedes en la cantidad de sal que consumes, puedes llegar experimentar problemas de hipertensión arterial los cuales son muy peligrosos, pues pueden desencadenar un infarto o un evento vascular cerebral.
La sal ha sido desde siempre un producto fundamental en la cocina de todo el mundo, y en la actualidad, la mayoría delas personas excedemos la dosis recomendada por la Organización Mundial de la Salud, que es de sólo 5 gramos diarios, (estamos hablando de que, tan sólo una cuchara sopera contiene 15 gramos de sal), cantidad que rebasamos, por mucho,durante todas las comidas del día.
Una dieta rica en sodio se asocia, a largo plazo, con un aumento de la hipertensión arterial. Las autoridades sanitarias del Distrito Federal han puesto interés en esta situación y han exhortado a los restaurantes a que retiren de sus mesas todos los saleros, para evitarle al comensal la tentación de espolvorearla en sus platillos.
Sin embargo, la mayoría de la sal que consumimos no proviene propiamente de los platillos que se preparan en casa o en restaurantes, sino de los alimentos industrializados, pues a estos se les añade grandes cantidades del condimento. Además de realzar el sabor de los ingredientes, la sal hace que queramos comer más y más de ese alimento. No por nada, cuando comemos papas fritas, nos es difícil “comer sólo una”.
Para procurar una dieta baja en sodio,existen algunos ingredientes que pueden evitarse. Recuerda que hay algunas alternativas más saludables que la sal y que no representan un peligro para ti:
·Utiliza especias para darle más sabor a tus alimentos. Usa polvo de ajo y cebolla.
·Evita el consumo de alimentos procesados.Las sopas instantáneas, los arroces precocidos, los consomés en cubo, los embutidos y las carnes ahumadas como el jamón y el tocino. Evita también los pescados en salazón, como el bacalao y carnes como la cecina.
·Lee las etiquetas y elige aquellos productos que no contengan entre sus ingredientes glutamato monosódico, un aditivo químico que realza de manera notable el sabor de los alimentos, pero que, según algunos estudios, es causante de enfermedades a corto y largo plazo.
·Evita en lo más mínimo comer botanas fritas y palomitas de maíz, es mejor prepararlas en casa y añadirles sal de manera moderada.
·No le pongas sal a la comida antes de probarla; utilízala sólo en caso de que sea muy necesario.
La sal realza los sabores de los alimentos y puede utilizarse en la gran mayoría de los platillos. Es un producto básico en la alimentación actual, sin embargo, cuando te excedes en la cantidad de sal que consumes, puedes llegar experimentar problemas de hipertensión arterial los cuales son muy peligrosos, pues pueden desencadenar un infarto o un evento vascular cerebral.
La sal ha sido desde siempre un producto fundamental en la cocina de todo el mundo, y en la actualidad, la mayoría delas personas excedemos la dosis recomendada por la Organización Mundial de la Salud, que es de sólo 5 gramos diarios, (estamos hablando de que, tan sólo una cuchara sopera contiene 15 gramos de sal), cantidad que rebasamos, por mucho,durante todas las comidas del día.
Una dieta rica en sodio se asocia, a largo plazo, con un aumento de la hipertensión arterial. Las autoridades sanitarias del Distrito Federal han puesto interés en esta situación y han exhortado a los restaurantes a que retiren de sus mesas todos los saleros, para evitarle al comensal la tentación de espolvorearla en sus platillos.
Sin embargo, la mayoría de la sal que consumimos no proviene propiamente de los platillos que se preparan en casa o en restaurantes, sino de los alimentos industrializados, pues a estos se les añade grandes cantidades del condimento. Además de realzar el sabor de los ingredientes, la sal hace que queramos comer más y más de ese alimento. No por nada, cuando comemos papas fritas, nos es difícil “comer sólo una”.
Para procurar una dieta baja en sodio,existen algunos ingredientes que pueden evitarse. Recuerda que hay algunas alternativas más saludables que la sal y que no representan un peligro para ti:
·Utiliza especias para darle más sabor a tus alimentos. Usa polvo de ajo y cebolla.
·Evita el consumo de alimentos procesados.Las sopas instantáneas, los arroces precocidos, los consomés en cubo, los embutidos y las carnes ahumadas como el jamón y el tocino. Evita también los pescados en salazón, como el bacalao y carnes como la cecina.
·Lee las etiquetas y elige aquellos productos que no contengan entre sus ingredientes glutamato monosódico, un aditivo químico que realza de manera notable el sabor de los alimentos, pero que, según algunos estudios, es causante de enfermedades a corto y largo plazo.
·Evita en lo más mínimo comer botanas fritas y palomitas de maíz, es mejor prepararlas en casa y añadirles sal de manera moderada.
·No le pongas sal a la comida antes de probarla; utilízala sólo en caso de que sea muy necesario.