El invierno ha llegado y con él las bajas temperaturas que para este año serán acompañadas de varios frentes fríos lo que provocará una temperatura menos, por lo que los especialistas del salud recomiendan extremar medidas para evitar el contagio de enfermedades respiratorias, ya que el riesgo se incrementa a causa de la exposición a temperaturas ambientales bajas, principalmente en niños y adultos mayores.
Para evitar riesgos a la salud siga las siguientes recomendaciones:
1. Contagios. Muchas veces la lluvia y las bajas temperaturas impiden realizar actividades al aire libre, o salir fuera de casa. Por eso, una correcta ventilación, evitar el hacinamiento y mantener ciertos hábitos como el lavado permanente de manos es fundamental para evitar el contagio de infecciones, incluso si se ha recibido la vacuna contra la influenza.
Usar pañuelos desechables y taparse la boca con el brazo antes de toser también es importante. Uno de los mayores riesgos es contraer enfermedades respiratorias, las que, si bien están presentes durante todo el año, se acentúan durante estos meses más fríos
2. Hidratación. Las personas mayores tienden a sentir menos sensación de sed, es por eso que es importante mantener una adecuada ingesta de líquidos. Una buena hidratación también influye en la elasticidad y grosor de la piel, característica que se va perdiendo con los años y que se acentúa con el frío y con el calor seco de la calefacción. El resultado puede ser la disminución de las barreras protectoras de la piel y la aparición de distintos tipos de infecciones. Aplicarse cremas hidratantes para lubricar también es aconsejable.
3. Bajas temperaturas. Abrigarse de forma adecuada para evitar la pérdida de calor corporal es fundamental, así como evitar los cambios bruscos de temperatura. Esto es especialmente importante en los adultos mayores, ya que tienen disminuidos los mecanismos de defensa del cuerpo ante el frío.
4. Alimentación. Mantener una dieta balanceada e incluir alimentos ricos en fibra y antioxidantes. De esta forma se refuerza el sistema inmune para pasar de mejor manera los meses más fríos.
5. Accidentes. Caídas, quemaduras o intoxicaciones por gas también pueden aumentar en esta época del año ya que los adultos mayores pasan la mayor parte del tiempo dentro de su hogar. Por eso es importante revisar las instalaciones de gas, preocuparse de que las habitaciones tengan buena iluminación y evitar dejar cosas en el suelo con las que puedan caer o tropezar. 6. Emociones. Acompañar de manera especial a los adultos mayores en esta época del año es importante para evitar sentimientos de soledad o nostalgia, comunes en estos meses. El clima frío muchas veces impide salir de la casa para sociabilizar y en algunos casos es necesario suspender actividades que durante los meses de más calor permitían mantenerse entretenidos y acompañados.
El invierno ha llegado y con él las bajas temperaturas que para este año serán acompañadas de varios frentes fríos lo que provocará una temperatura menos, por lo que los especialistas del salud recomiendan extremar medidas para evitar el contagio de enfermedades respiratorias, ya que el riesgo se incrementa a causa de la exposición a temperaturas ambientales bajas, principalmente en niños y adultos mayores.
Para evitar riesgos a la salud siga las siguientes recomendaciones:
1. Contagios. Muchas veces la lluvia y las bajas temperaturas impiden realizar actividades al aire libre, o salir fuera de casa. Por eso, una correcta ventilación, evitar el hacinamiento y mantener ciertos hábitos como el lavado permanente de manos es fundamental para evitar el contagio de infecciones, incluso si se ha recibido la vacuna contra la influenza.
Usar pañuelos desechables y taparse la boca con el brazo antes de toser también es importante. Uno de los mayores riesgos es contraer enfermedades respiratorias, las que, si bien están presentes durante todo el año, se acentúan durante estos meses más fríos
2. Hidratación. Las personas mayores tienden a sentir menos sensación de sed, es por eso que es importante mantener una adecuada ingesta de líquidos. Una buena hidratación también influye en la elasticidad y grosor de la piel, característica que se va perdiendo con los años y que se acentúa con el frío y con el calor seco de la calefacción. El resultado puede ser la disminución de las barreras protectoras de la piel y la aparición de distintos tipos de infecciones. Aplicarse cremas hidratantes para lubricar también es aconsejable.
3. Bajas temperaturas. Abrigarse de forma adecuada para evitar la pérdida de calor corporal es fundamental, así como evitar los cambios bruscos de temperatura. Esto es especialmente importante en los adultos mayores, ya que tienen disminuidos los mecanismos de defensa del cuerpo ante el frío.
4. Alimentación. Mantener una dieta balanceada e incluir alimentos ricos en fibra y antioxidantes. De esta forma se refuerza el sistema inmune para pasar de mejor manera los meses más fríos.
5. Accidentes. Caídas, quemaduras o intoxicaciones por gas también pueden aumentar en esta época del año ya que los adultos mayores pasan la mayor parte del tiempo dentro de su hogar. Por eso es importante revisar las instalaciones de gas, preocuparse de que las habitaciones tengan buena iluminación y evitar dejar cosas en el suelo con las que puedan caer o tropezar. 6. Emociones. Acompañar de manera especial a los adultos mayores en esta época del año es importante para evitar sentimientos de soledad o nostalgia, comunes en estos meses. El clima frío muchas veces impide salir de la casa para sociabilizar y en algunos casos es necesario suspender actividades que durante los meses de más calor permitían mantenerse entretenidos y acompañados.