Un medicamento anti cáncer pudo revertir los problemas de memoria relacionados con el Alzheimer en ratones de laboratorio. La investigación de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Pittsburgh promete revolucionar el tratamiento de esta enfermedad degenerativa.
La medicina, que podría significar un antes y un después en el tratamiento del Alzheimer, se llama bexarotene y fue aprobada por la Administración de Drogas y Alimentos (FDA, por sus siglas en inglés) para tratar un cáncer de la piel, o linfoma.
Los científicos comprobaron que esta droga mejoraba notoriamente las deficiencias cognitivas vinculadas al Alzheimer. “Creemos que este primer estudio obliga a seguir investigando el bexarotene como un tratamiento terapéutico del Alzheimer”, explicó Rada Koldamova, quien participó en el estudio.
Según la investigación realizada en laboratorio —el próximo paso es el análisis en seres humanos— esta droga elevó la capacidad de memoria y “limpió el cerebro de los ratones de plaquetas tóxicas vinculadas al deterioro neuronal que provoca el avance del Alzheimer”.
El bexarotene es un compuesto químico primo hermano de la vitamina A que estimula la acción de receptores que controlan distintas funciones biológicas. Y ahora, los investigadores comprobaron que revierte uno de los síntomas más críticos, la pérdida de memoria, que indican que el Alzheimer está avanzando.
Este trabajo es la gran conclusión de 10 años de investigación de este compuesto.
Los autores del estudio, publicado en la revista “Alzheimer”s Research and Therapy”, dicen que aún queda un camino por recorrer, especialmente para ver si el bexarotene limpia las plaquetas cerebrales.
En realidad, esperan que esta parte de la investigación pueda dilucidarse durante pruebas con el medicamento en seres humanos, algo que tal vez ocurrirá pronto.
Uno de cada 8 adultos mayores padecen de Alzheimer, según el Instituto Nacional del Envejecimiento.
El mal de Alzheimer es una forma de demencia que gradualmente empeora con el tiempo y afecta la memoria, el pensamiento y el comportamiento.
Un medicamento anti cáncer pudo revertir los problemas de memoria relacionados con el Alzheimer en ratones de laboratorio. La investigación de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Pittsburgh promete revolucionar el tratamiento de esta enfermedad degenerativa.
La medicina, que podría significar un antes y un después en el tratamiento del Alzheimer, se llama bexarotene y fue aprobada por la Administración de Drogas y Alimentos (FDA, por sus siglas en inglés) para tratar un cáncer de la piel, o linfoma.
Los científicos comprobaron que esta droga mejoraba notoriamente las deficiencias cognitivas vinculadas al Alzheimer. “Creemos que este primer estudio obliga a seguir investigando el bexarotene como un tratamiento terapéutico del Alzheimer”, explicó Rada Koldamova, quien participó en el estudio.
Según la investigación realizada en laboratorio —el próximo paso es el análisis en seres humanos— esta droga elevó la capacidad de memoria y “limpió el cerebro de los ratones de plaquetas tóxicas vinculadas al deterioro neuronal que provoca el avance del Alzheimer”.
El bexarotene es un compuesto químico primo hermano de la vitamina A que estimula la acción de receptores que controlan distintas funciones biológicas. Y ahora, los investigadores comprobaron que revierte uno de los síntomas más críticos, la pérdida de memoria, que indican que el Alzheimer está avanzando.
Este trabajo es la gran conclusión de 10 años de investigación de este compuesto.
Los autores del estudio, publicado en la revista “Alzheimer”s Research and Therapy”, dicen que aún queda un camino por recorrer, especialmente para ver si el bexarotene limpia las plaquetas cerebrales.
En realidad, esperan que esta parte de la investigación pueda dilucidarse durante pruebas con el medicamento en seres humanos, algo que tal vez ocurrirá pronto.
Uno de cada 8 adultos mayores padecen de Alzheimer, según el Instituto Nacional del Envejecimiento.
El mal de Alzheimer es una forma de demencia que gradualmente empeora con el tiempo y afecta la memoria, el pensamiento y el comportamiento.